Existen tres patrones de queratodermias palmoplantares diferentes: difusa, focal y punctata. La queratodermia palmoplantar difusa, que es un trastorno autosómico dominante, se divide en dos tipos: la queratodermia palmoplantar difusa epidermolítica, que se presenta con un aspecto de piel de serpiente, y la queratodermia palmoplantar difusa no epidermolítica, que tiene un aspecto ceroso.
La queratodermia palmoplantar focal presenta masas compactas de queratina en zonas de presión continuada con una disposición discoide o lineal, mientras que la queratodermia palmoplantar punctata se caracteriza por pequeñas queratosis en forma de gotas de agua en las palmas de las manos y plantas de los pies.
La queratosis punctata de palmas y pies es una queratodermia autosómica dominante con múltiples y pequeñas queratosis, mientras que la queratodermia espinosa es una queratodermia autosómica dominante de aparición tardía caracterizada por múltiples tapones queratósicos, y la hiperqueratosis acral focal es una queratodermia tardía debida a una condición autosómica dominante caracterizada por pápulas en forma de cráter.